En el último tiempo, el mundo logístico aceleró en el camino de la digitalización. A pasos agigantados, las empresas avanzaron esta nueva mirada; una mirada tecnológica que busca responder a los desafíos en materia de competitividad y productividad.

Bajo este escenario, una de las tendencias que se ha posicionado es la robotización de procesos intralogísticos. Los Centros de Distribución han sido sujeto de distintos reajustes y rediseños para responder a los desafíos actuales que ha puesto en jaque los procesos de almacenamiento, picking, preparación de pedidos, embalaje, entre otros.

Lejano queda la idea de que las tecnológicas son exclusivas de grandes compañías. Hoy, estas soluciones se acercan cada vez más a las empresas, adaptándose a proyectos de distintas envergaduras. La inversión en estas herramientas se justifica en nombre de la mejora operacional, del nivel de servicio y del proyecto logístico que se desea. ¡Hoy es el tiempo de la Tecnología!

Y este escenario de incertidumbre, de cambios, de tensiones en las cadenas de suministros ha generado, en definitiva, un nuevo rol de la logística como factor clave en el éxito comercial de las empresas. Y entendiendo este panorama y las nuevas exigencias, la robotización asoma con fuerza, dando a las operaciones un salto hacia adelante. Ya no hablamos de futuro, sino de presente.

El mundo post pandemia estará marcado por la digitalización, automatización y robotización de los procesos; materializando y masificando el concepto de Logística 4.0. En este sentido, los robots autónomos móviles (AMR) que permiten un diseño inteligente del movimiento de los productos son una alternativa cada vez más viable para las compañías nacionales.

Symple – AMR

Pero, ¿qué ganamos con esa inteligencia? Exactitud, rapidez, eficiencia, productividad, agilidad, calidad de servicio y experiencia del cliente. En otras palabras, la robotización permite llevar la cadena de suministro al máximo nivel de rendimiento, por ejemplo, en procesos de clasificación, de preparación de pedidos o de picking.

Pasamos desde un escenario donde las tecnologías eran sinónimo de futuro a otro donde estas soluciones cobran valor en el presente inmediato, de cara a la productividad y continuidad operacional de las compañías. Se ha acelerado, sin duda, la penetración de sistemas de robotización y automatización en las cadenas de suministro. Por lo tanto, el llamado es a sumarse a esta tendencia e impulsar una logística marca diferencias a nivel de servicio.

Recorrer el camino de la automatización y robotización es hoy un impostergable. No hay que tener miedo a diseñar un proceso ágil y moderno –acompañado de un proceso de diseño e implementación adecuada- que permita ser competitivo, en términos logísticos, en el nuevo escenario comercial.

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